Para muchos es una preocupación ecológica
Para otros es una desgracia en plena ciudad
Para otros es un simple rió hediondo
Para otros simplemente no esta.
Para la fotógrafa Amanda Granado, este rió fue sido sinónimo de inspiración para la serie fotografía del 2009 "Guaire", que muestra de manera sarcástica - e incluso irónica - a este como un balneario, creando un constaste con lo anti-higiénico y el placer.
Referentes a este trabajo fotografico existen varios articulos
EL NACIONAL. Lunes 22 de Marzo de 2009. La Individual del Lunes. Amada Granado. Guaire.
Juan Antonio González
Hedonistas de la hediondez. Bellos en la fealdad. Los personajes de esta serie conviven en perfecta desarmonía con un entorno de detritos. No obstante, se entienden bien con la basura. Encajan en ella. Son hermosos despojos, figuras de porceloana Made in China para colocar encima del televisor, sobre un pañito de pabilo tejido. Los santos de un altar de mal gusto. Una reedición de los viejos nuevos ricos del dólar a 4,30. Patéticos, esperpénticos, dolorasamente hermosos.
En apenas 8 magníficas imágenes, compuestas con un alto sentido cinematográfico y de las que La Individual del Lunes nos recuerda que en la ribera del río que recorre 72 kilómetros de una Caracas tan degradada como sus aguas existe una ciénaga como la retratada por la argentina Lucrecia Martel. Un lodazal en el que habitan criaturas como la señora con várices en las piernas que lee feliz en su tumbona los consejos de belleza de una revista de banalidades, o como el macho con bigotico a los Rodolfo Valentino que esculpe su cuerpo sobre pedestal de desechos.
Guaire, ensayo fotográfico , obliga a meterse más allá de las orillas de los nauseabundo. A pesar en sus imágenes un poco de reflexión, pero no desde la severidad del discurso sociológico, sino desde la contundencia del humor y la ironía, mucho más fácil de salpicarnos, de ensuciarnos.
Juan Antonio González
Hedonistas de la hediondez. Bellos en la fealdad. Los personajes de esta serie conviven en perfecta desarmonía con un entorno de detritos. No obstante, se entienden bien con la basura. Encajan en ella. Son hermosos despojos, figuras de porceloana Made in China para colocar encima del televisor, sobre un pañito de pabilo tejido. Los santos de un altar de mal gusto. Una reedición de los viejos nuevos ricos del dólar a 4,30. Patéticos, esperpénticos, dolorasamente hermosos.
En apenas 8 magníficas imágenes, compuestas con un alto sentido cinematográfico y de las que La Individual del Lunes nos recuerda que en la ribera del río que recorre 72 kilómetros de una Caracas tan degradada como sus aguas existe una ciénaga como la retratada por la argentina Lucrecia Martel. Un lodazal en el que habitan criaturas como la señora con várices en las piernas que lee feliz en su tumbona los consejos de belleza de una revista de banalidades, o como el macho con bigotico a los Rodolfo Valentino que esculpe su cuerpo sobre pedestal de desechos.
Guaire, ensayo fotográfico , obliga a meterse más allá de las orillas de los nauseabundo. A pesar en sus imágenes un poco de reflexión, pero no desde la severidad del discurso sociológico, sino desde la contundencia del humor y la ironía, mucho más fácil de salpicarnos, de ensuciarnos.
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